By: neurosciencenews.com
En una era de panaceas aparentemente interminables para el deterioro mental basado en la edad, navegar a través del desorden puede ser un desafío considerable.
Sin embargo, un equipo de investigadores de Duke, dirigido por la neurocientífica cognitiva Edna Andrews, PhD, cree que puede haber encontrado una solución sólida y a largo plazo para contrarrestar este declive y prevenir patologías en un cerebro que envejece.
Su enfoque no requiere un procedimiento invasivo o alguna intervención farmacológica, solo un buen oído, algunas partituras y tal vez un instrumento o dos.
A principios de 2021, Andrews y su equipo publicaron uno de los primeros estudios para analizar el impacto de la maestría musical en la construcción de una reserva cerebral cognitiva. La reserva cerebral cognitiva, en pocas palabras, es una forma de calificar la resiliencia del cerebro frente a diversas patologías. Los altos niveles de reserva cognitiva pueden ayudar a evitar la demencia, la enfermedad de Parkinson o la esclerosis múltiple durante años.
Estos niveles se cuantifican a través de mediciones estructurales de materia gris y materia blanca en el cerebro. Se puede pensar en la materia blanca como el cableado aislado que ayuda a las diferentes áreas del cerebro a comunicarse.
En este estudio en particular, el equipo de Andrews se centró en las mediciones de la integridad de la materia blanca a través de una técnica de resonancia magnética avanzada conocida como imágenes de tensor de difusión, para ver en qué forma se encuentra.
Estudios previos de neuroimagen han revelado que el envejecimiento normal conduce a una disminución de la integridad de la materia blanca en todo el cerebro. Sin embargo, durante los últimos quince años, los investigadores han descubierto que las actividades sensoriales y motoras complejas pueden ralentizar e incluso revertir la pérdida de integridad de la materia blanca. Los dos ejemplos más sólidos de actividades sensoriales y motrices complejas son el multilingüismo y la maestría musical.
Andrews lleva mucho tiempo fascinado por el cerebro y los idiomas. En 2014, publicó uno de los textos seminales en el campo de la neurolingüística cognitiva donde sentó las bases para un nuevo modelo neurocientífico del lenguaje. Casi al mismo tiempo, publicó el primer y hasta la fecha único estudio longitudinal de IRMf sobre la adquisición de un segundo idioma. Sus hallazgos, basados en décadas de investigación en neurociencia cognitiva y lingüística, sirvieron como base para su popular curso FOCUS: Neurociencia/lenguaje humano.
En años más recientes, ha cambiado el enfoque de su investigación para comprender el impacto de la maestría musical en la reserva cognitiva del cerebro. Animada por su experiencia vivida como música y compositora profesional, quería ver si la maestría musical de por vida podría aumentar la integridad de la materia blanca a medida que uno envejece. Ella y su equipo plantearon la hipótesis de que la maestría musical aumentaría la integridad de la materia blanca en ciertos tramos de fibra relacionados con el acto de hacer música.
Para lograr este objetivo, ella y su equipo escanearon los cerebros de ocho músicos diferentes con edades comprendidas entre los 20 y los 67 años. Estos músicos dedicaron un promedio de tres horas al día a la práctica y habían ganado años de experiencia interpretativa. Después de colocar a los participantes en la máquina de resonancia magnética, los investigadores utilizaron imágenes de tensor de difusión para calcular los valores de antisotropía fraccional (FA) para ciertos tractos de fibra de materia blanca.
Un valor más alto de FA significaba una mayor integridad y, en consecuencia, una mayor reserva cerebral cognitiva. Andrews y su equipo optaron por observar los valores de FA en dos tractos de fibras, el fascículo longitudinal superior (SLF) y el fascículo uncinado (UF), en función de su relevancia para la musicalidad en estudios previos.
Estudios previos de los dos tractos de fibra en no músicos encontraron que su integridad disminuía con la edad. En otras palabras, cuanto mayor es la edad de los participantes, menor es la integridad de la materia blanca en estas regiones. Tras analizar los valores de anisotropía mediante regresión lineal, observaron una clara correlación positiva entre la edad y la anisotropía fraccional en ambos tractos de fibras. Estas tendencias eran visibles en ambos tractos de los hemisferios izquierdo y derecho del cerebro. Tal observación corroboró su hipótesis, sugiriendo que la maestría musical altamente competente puede aumentar la reserva cerebral cognitiva a medida que uno envejece.
Estos hallazgos amplían la literatura existente sobre cambios en el estilo de vida que pueden mejorar la salud del cerebro más allá de la dieta y el ejercicio. Aunque más exigentes, los cambios neurológicos resultantes de la adquisición y el mantenimiento de las capacidades del lenguaje y la música tienen el potencial de durar más tiempo en el ciclo de vida.
Andrews es uno de los más firmes defensores del aprendizaje permanente, no solo por la satisfacción que genera, sino también por el impacto tangible que puede tener en la reserva cerebral cognitiva. Aprender un nuevo idioma o un nuevo instrumento no debe ser una actividad exclusiva del niño pequeño.
Parece, entonces, que la forma más amable de tratar el cerebro es arrojarle algo nuevo. Un poco de práctica tampoco vendría mal.
Efectos de la maestría musical de por vida en la integridad de la materia blanca y la reserva cognitiva del cerebro
Existe un importante cuerpo de investigación que ha identificado actividades y estilos de vida específicos de alta demanda cognitiva que pueden desempeñar un papel en la construcción de la reserva cerebral cognitiva, incluidos los cambios de volumen en la materia gris y la materia blanca, una mayor conectividad estructural y una percepción categórica mejorada.
Si bien el envejecimiento normal produce tendencias de disminución de la integridad de la materia blanca (WM), la investigación sobre la reserva cerebral cognitiva sugiere que las actividades sensoriales y motoras complejas a lo largo de la vida pueden ralentizar o revertir estas tendencias.
Investigaciones anteriores se han centrado en los cambios estructurales y funcionales en el cerebro humano causados por el entrenamiento y la experiencia tanto en el dominio lingüístico (especialmente el bilingüismo) como en el musical. La investigación actual utiliza imágenes de tensor de difusión para examinar la integridad de los tractos de fibra de materia blanca subcortical en músicos de toda la vida.
Nuestro análisis, utilizando Tortoise e ICBM-81, revela una mayor anisotropía fraccional, un indicador de una mayor integridad de WM, en músicos mayores en fascículos longitudinales superiores bilaterales y fascículos uncinados bilaterales. Los métodos estadísticos utilizados incluyen el método de Fisher y el análisis de regresión lineal. Otro aspecto único de este estudio son los datos de rendimiento del comportamiento que acompañan a cada participante.
Este es uno de los primeros estudios que analiza específicamente la maestría musical a lo largo de la vida y su impacto en la integridad de la WM bilateral en el envejecimiento.